Bienvenidos mis pervertid@s!
Esta entrada es un nueva práctica sexual para mi enciclopedia sexual: La felación.
Es el termino que se utiliza al sexo oral dirigido a los hombres. Para decirlo de forma más divertida: Chuparle la polla. Para los mas delicad@s, dar masajitos con la boca al aparato reproductor masculino. Esta práctica se remonta a tiempos insospechados, se han encontrado documentos, vasijas y arte erótico donde se ve como en la Grecia Antigua o Egipto ya se practicaba este satisfactorio arte.
Sinceramente, el secreto de una felación exitosa es la práctica. Siempre se ha dicho que la mejor paja es la que se hace uno mismo. Te conoces, sabes que movimientos te gustan y cuales no. Y en este sentido , los hombres no son iguales. Algunos son más sensibles que otros. Cuando empiezas con un chico en principio vas un poco a la aventura, pero después de algunas sesiones empiezas a darte cuenta que hay movimientos, sensaciones que hacen que tu chico se derrita de placer.
Para mí, la felación es un arte. No se tiene que tomar a la ligera, puedes hacer daño a tu pareja o quitarle las ganas de seguir si ve que se hace obligado y sin ganas. Cuando yo chupo, me excito. Realmente me mojo y me empapo. Ver a mi novio disfrutar, gemir y poner los ojos en blanco hace que yo me excite aun más.
Como dijo Jack el destripador, vayamos por partes:
Para comenzar no es bueno ir a saco, al menos que tu pareja te lo pida. Puedes estar en dos situaciones, o que tu chico este excitado (Su pene ya está contento), o que seas tu la que este cachonda perdida. En el primero caso puedes bajarle los pantalones y empezar. Se puede jugar a un juego de rol, de dominación y sumisión. En ese caso es el chico quien te maneja, porque en esas situaciones estas a su merced y/o atada. Cuando estas así no puedes jugar mucho. Pero ambos tenéis que ser conscientes de las limitaciones.
En sí, dos cosas: por su parte, él no puede empezar a meterte la polla en la boca hasta el fondo a lo bestia a menos que tengas práctica. Eso es algo que se puede entrenar, si lo hace de repente lo más seguro es que no puedas respirar bien y te angusties. Incluso te pueden dar arcadas. Si tu chico quiere hacerlo, perfecto, pero ensayad y ve poco a poco. Yo lo se muy bien, actualmente si que me la meto entera. Tu por tu parte, tienes que tener cuidado con los dientes. Le puedes hacer mucho daño si empujas a lo bestia y tienes la boca media cerrada: puedes llevarte la piel. A ver a mi no me a pasado, pero de gente que sí. Si sois de los atrevidos, deja que tu chico juegue con su polla en tu cara, a mi me excita mucho cuando el me da tortacitos en la cara con su polla y sobre mis labios.
En la segunda opción, tienes que ir poco a poco. Lo más importante es la actitud. Tienes que estar increíblemente seductora. Bajar sus pantalones y empezar a besarle la parte alta del pubis con suavidad. Utiliza tu lengua para marcar un camino que acabe en su amiguito. Me encanta metermela en la boca y notar como va creciendo hasta que dejar de caberme en la boca de forma natural.
Ahora quiero compartir algunos de mis trucos a la hora de chupar:
Estas son las partes del pene en general:
- La zona más sensible es el glande. ¡¡¡¡Ten cuidado con los dientes!!!! Chúpalo como su fuera un chupete, ve despacio con la lengua. Empieza de arriba a abajo como si fueras un gato. Muy suavemente. Puedes utilizar la lengua de forma circular por todo el glande. Si tenéis control, podéis utilizar los dientes y pasarlos muy, muy pero que muy suavemente por el glande como si le dieras un mordisquito. También con la punta de la lengua puedes darle por la entrada de la uretra, pero hay hombres que no les gusta eso para nada, si no lo conoces prueba y que sea el quien te diga. En esta práctica, como en todas que se hacen en pareja, tiene que haber comunicación. Tu no tienes una bola de cristal con la que averiguar los gustos de tu chico, él tiene que poner un poco de su parte.
- Otra parte con la que jugar es el frenillo. Cuando un hombre se hace una paja, lo que provoca la eyaculación es la subida y la bajada de la piel, la cual se une al resto por el frenillo. Es una zona muy sensible y si la utilizas bien tu chico gemirá de placer. Yo utilizo los dedos, el indice para ser exactos. Me lo mojo en saliva, y doy arriba y abajo lentamente. Ve cogiendo ritmo y aumentarlo lentamente. Tu chico se volverá loco, y seguro que intentará que te la metas entera en la boca.
- Podría decirse, que la siguiente zona es la menos sensible, es lo que sería el tronco del pene. Con el se puede jugar con las manos, ejerciendo diferentes presiones. Con tu chico podrás ir probando. Yo ejerzo una presión seguida un leve con los dedos, lo mezclo con el dedo gordo en el frenillo y la lengua sobre el glande. También juega con la lengua, paseala por el tronco, bésalo por los lados y dale mordisquitos cariñosos.
- Finalmente, tenemos sus testículos Hay hombres, que para ellos sus testículos son sagrados y muy sensibles. Al principio mi novio le daba cosa que se los tocara, pero con práctica mucho cariño y esmero se consiguen muchas cosas. Yo conseguí que mi novio adorara mis masajitos en sus huevos. Puedes usar la lengua también. Hay chicas que les da como cosa y no se porqué.
El éxito en la felación está en la comunicación, pregúntale que le gusta y mira sus expresiones mientras lo haces, eso te guiará.
Y recuerda la felación es un arte, no la chupes por chupar. ¡Disfruta mamando y mójate!